La vela eclesiástica - la posesión sagrada del cristianismo. Ella es el símbolo de nuestra alianza espiritual con la Santa Madre Iglesia. Las velas que los creyentes compran para colocar en los candeleros junto a los íconos tienen significados algo espirituales: desde que se compra la vela, es el signo del sacrificio voluntario del hombre a Dios y Su Templo, la expresión de la voluntad del hombre de obedecer a Dios ( la suavidad de la cera), su lucha hacia îáîæåíèþ, la transformación en el nuevo ser (el encendido de la vela). La vela es también el testimonio de la fe, de la participación del hombre en la Luz Divina. La vela expresa la calidez y el ïëàìåíü del amor del hombre por Dios, la Madre de Dios, el ángel o el santo, en cuyo rostro el creyente coloca la vela.
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