Un colgante de amatista puede ser un regalo maravilloso para su amada mujer. En la antigüedad se creía que este mineral ayuda a lograr el equilibrio mental y la paz, y protege contra las desgracias. En Rusia también se la llamaba piedra del obispo, por su color violeta intenso. En la tradición cristiana, se considera la piedra del apóstol Mateo.
La amatista es una piedra semipreciosa que va del lila claro al violeta intenso. Cuando se corta, este mineral adquiere una apariencia verdaderamente real y, cuando se enmarca en oro o plata, puede brillar con nuevos colores.